viernes, 28 de septiembre de 2018

"Gobernar es explicar"


”GOBERNAR ES EXPLICAR”

Malú Kikuchi  (28/9/2018)

La Argentina vive de crisis en crisis, Juan Carlos De Pablo sostiene que la Argentina no tiene ciclos, tiene ciclones. Es cierto. Y en medio de uno de ellos, con el Presidente en Nueva York acompañado por su Ministro de Hacienda y Finanzas, Luis Caputo presidente del *BCRA, renuncia.

Luis Caputo, el nominado presidente del Banco Central de la República Argentina, renuncia. Justo cuando Macri, Dujovne y comitiva, tratan, intentan convencer al FMI, a los banqueros, a Wall Street y a los mercados, que la Argentina es un país serio, previsible y confiable.

¿Cómo creerles? Imposible. Se sabía que Caputo no estaba de acuerdo con el acuerdo firmado por Sturzenneger con el FMI, el quería autonomía absoluta (como lo indica la constitución de BCRA), el FMI no estaba de acuerdo con la venta indiscriminada de reservas, llegado el caso. Dicen.

Caputo y el FMI no acordaban, el FMI nos era imprescindible, Caputo, no. ¿Pero tenía que renunciar justo en el momento en que lo hizo? No es serio, es desprolijo, huele a venganza. Es triste y feo. Y los argentinos estamos esperando una detallada explicación de porqué pasó lo que pasó.

De eso, nada. Como si hubiese sido un hecho aislado, que no tiene nada que ver con la crisis económica /financiera/cambiaria que sufre el país. Cuando la imparable inflación de Brasil, que heredó el presidente Itamar Franco (1992-1994), siendo su ministro de Hacienda Fernando Henrique Cardoso, éste recorrió Brasil, los 26 estados, explicando el Plan del Real.

En cada estado, en cada ciudad, en cada pueblo, empezaba diciendo: “Gobernar es explicar”. Fernando Henrique es sociólogo, entre otras cosas, conocía a la gente, lo que la gente necesitaba. Para comprender, primero hay que explicar, para pedir sacrificios, primero hay que explicar.

El Plan del Real era toda una revolución, no pedían un préstamo al FMI. Era un plan que iba a cambiar no sólo la moneda (antes cruzeiro), iba a cambiar la estructura económica del Brasil. Se puso en marcha en junio de 1994, fue un éxito con la baja de la inflación y con el resto. Fernando Henrique fue presidente desde 1995 hasta 2003, le ganó 2 veces a Lula.

Cardoso EXPLICABA. Es lo que necesitamos. Explicaciones verídicas, simples, detalladas. Necesitamos saber. Somos los dueños del país, el gobierno es sólo un administrador elegido por nosotros para cumplir una función gerencial por 4 años, si lo hace bien, puede que por otros 4.

A este paso, los otros 4 posibles años de gerenciamiento, se alejan muy rápido. No somo niños a los que hay que ocultarles las cosas. Si tienen  problemas dentro del gabinete, es normal con tanta gente. Porque nombrar secretarías en vez de ministerios, sin cambiar a los personajes que las manejan, es maquillaje para infantes, y no lo somos.

Es cierto que reconocen sus errores, que son muchos. No mienten, dicen la verdad. Pero no explican casi nada y cuando lo hacen, lo hacen sin ganas. Un gobierno sin mística no convence. Y necesitamos que nos convenzan. Necesitaos conocer el cómo, el qué ya lo sabemos.

Todos los gobiernos quieren gobernar bien, pocos lo hacen en la Argentina. Todos quieren pobreza cero, todos quieren una economía sana y fuerte, alejada de los sacudones del exterior, todos quieren un pueblo feliz, pero este gobierno no nos explica cómo lo piensan conseguir.
Heredaron un país destruido, no lo explicaron. Se equivocaron muchas veces, lo reconocieron, pero no explicaron los errores. Hacen mucha obra pública, no lo explican lo suficiente. Se exporta carne, gas y petróleo, un éxito rotundo, no lo explican. Aumentan todo el tiempo los subsidios, particularmente la *AUH, puede que sea necesario, pero no es la solución.
Las soluciones pasan por educar más, distinto y mejor. Bajar los impuestos (y los suben), generar trabajo en blanco y bajar los subsidios, dar seguridad (falta), combatir el narcotráfico (no es suficiente). Hay que solucionar los problemas estructurales que destruyen la republica desde hace demasiados años. Soluciones, no parches.

Es pedir mucho, pero Macri se sintió capaz de hacerlo cuando se candidateó a presidente. La gente le creyó, lo votó en el balotaje y lo reconfirmó en las legislativas. Debe explicar hacia dónde vamos, porqué se eligió ese camino y como vamos a recorrerlo.

La gente entiende, si se le explica. Sabemos que vendrán tiempos más difíciles. Necesitamos saber el por qué y cómo lo solucionarán. Hacia dónde, por qué y cómo. Gobernar es explicar.

*BCRA: Banco Central de la República Argentina
*AUH: Asignación Universal por Hijo

viernes, 21 de septiembre de 2018


¿CONOCEN LA CONSTITUCIÓN?

Malú Kikuchi  (21/9/2018)

La pregunta no es sobre la estación de trenes y ómnibus que se encuentra en la ciudad de Buenos Aires. La pregunta se refiere a la Constitución Nacional, ésa que juró respetar y HACER RESPETAR, el gobierno nacional.

Se transita un mes caótico en un año caótico. Y el uso del verbo o “transitar” es deliberado, ya que el tránsito vehicular no funciona, gracias al caos que se vive en las calles. Y protestar, se puede, la Constitución lo permite.

Pero lo permite en las veredas, sobre las plazas, en lugares donde no se impida el tránsito vehicular. Porque también el mismo artículo (14) de la Constitución, dice que todos tienen derecho a circular libremente.

Eso ha desparecido de algunas ciudades argentinas. Y los gobiernos municipales y nacional, lo permiten. Los que deben llegar a horario al trabajo, los enfermos que deben llegar a los hospitales, que se joroben.

En ningún lugar del mundo se pueden cortar calles, ni en Miami, ni en la Habana. La policía identifica a los transgresores y los detiene. Quedan fichados y ya no les será tan fácil molestar al resto de las personas.

El artículo 16 dice que todos son iguales ante la ley. ¡Mentira! Los jueces no pagan los impuestos que pagan los ciudadanos de a pie o los de los otros poderes. La gente ante la crisis, se ajusta. Poderes legislativo y judicial, no. ¿Y la igualdad ante la ley? Pareciera que está escrita en el agua.

Si un juez pide la prisión preventiva de un/una acusado/a, y lo hace con razones valederas, se accede al pedido. Pero si es una senadora, ex presidente de la nación, sus fueros senatoriales no se levantan.
El senado sigue llamándose, sin derecho a ello, el Honorable Senado de la Nación. Se ha convertido en un aguantadero, defendido con timoratos asustados por probables carpetas o por miedo a que Ella vuelva al poder.

El gobierno va a explicar el estado caótico social que no es capaz de reprimir (reprimir: contener), por miedo a que le tiren 1 o  2 o 3 muertos, de los propios manifestantes, porque los policías muertos, no cuentan.

Eso ya tiene categoría de leyenda urbana. ¿Dónde está escrito que un gobierno debe irse si hay muertos en las calles? Debe averiguar quienes eran los muertos, y sobre todo, quienes fueron los asesinos y el por qué..

No es tan difícil. Es cuestión de investigar. ¿Para qué sino se pagan costosos equipos de ”inteligencia” al servicio del Estado? La AFI, ¿sirve para algo o sólo para pagar sueldos? Con la Constitución en la mano, y haciendo uso de ella, todo sería más simple, menos desquiciante.

Entre la CGT, Moyano, los movimientos sociales y parte de la Iglesia, que hacen paros, huelgas, piquetes, marchas y escraches, porque a los que organizan estos “planes de lucha” infernales, les va la libertad en ello.

El gobierno que debe proteger a sus ciudadanos de todas estas tropelías, está paralizado al respecto. O no conoce sus obligaciones, o le falta coraje y les sobra la ley. Una obligación del gobierno es defender la paz interior.

Y para saber eso, ni siquiera necesitan conocer la Constitución Nacional, les basta con leer el preámbulo. Por si no lo tienen a mano, por si no lo recuerdan (se estudió en la escuela), sin competir con Alfonsín, sólo para refrescar la memoria:
   “…con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, asegurando los beneficios de la libertad para nosotros, para nuestra posteridad…”  

Y todo lo anterior, se hace realidad ejerciendo el poder, con la ley en la mano y sin que esta tiemble por hacerla cumplir. Porque más allá de las negociaciones, que son imprescindibles al ejercer la política, la gobernabilidad se consigue con firmeza, los pueblos desprecian la debilidad y los políticos opositores, la huelen. Y eso es muy malo.

La gobernabilidad de una nación depende del coraje de su gobierno para hacer cumplir las leyes y hacer respetar su Constitución. Y por ahora, de eso, no se ha visto mucho.

viernes, 14 de septiembre de 2018

¿POR QUÉ NO LO DICEN?


¿POR QUÉ NO LO DICEN?

Malú Kikuchi  (14/9/2018)

El partido peronista “son” muchos partidos. Está el ortodoxo, el del mítico 17/10/1945 de Perón, está el *libertario de Menem y está el seudo revolucionario de los K, en particular el de Cristina Fernández de Kirchner.

Probablemente todos sean auténticos. Y simplemente han tenido la habilidad política de irse adecuando a los cambios y en alguna medida, incitando los cambios. El peronismo es difícil de describir y de explicar.

Dicen que es una doctrina, con lo que tiene algo de religioso, y se sabe que es un movimiento, lo que le permite esos bruscos cambios de rumbo, sosteniendo siempre que son peronistas auténticos. Cristina no tanto.
Ahora, septiembre de 2018, con corridas cambiarias que nos persiguen a los argentinos desde el mes de abril, con muchos errores por parte del gobierno y hechos internacionales que nos afectan, ¿qué hace el PJ?

Aparentemente está divido en dos: de un lado Cristina y su núcleo duro  dice  que le permitirán al PJ unirse a ellos en las próximas elecciones; y del otro lado (¿?) el llamado peronismo federal, que se enfrenta a CFK.

Desde afuera, parece que la división es real. Se espera que el peronismo federal o “bueno”, se organice, se convierta en un partido con principios institucionales sólidos, alejado del populismo, un partido del siglo XXI.

Esto no está sucediendo. No consiguen organizarse, no  se convierten en una alternativa probable para las elecciones del año que viene. Y lo que llama la atención es que siempre, inevitablemente, defienden a Cristina. 

Si realmente están enfrentados, a la hora de votar, no se nota. Cuando el kirchnerismo, con el nombre que quiera usar, “Frente para la Victoria” (al perder la presidencia, el nombre ya no sirvió), ahora “Unidad Ciudadana”, no sabemos si es peronismo, pero los votos en el congreso dicen que sí.

No importa tanto lo que haga CFK, su rechazo popular llega al 70%, nunca podría ganar un balotaje y lo sabe. El problema es el PJ “bueno”, que defiende sus fueros, como defiende los fueros del senador Menem.

Y cada vez que la gente de CFK hace algo destituyente, cada vez que se sabe que están detrás de los movimientos sociales que paralizan la ciudad, o de los vaivenes del mercado, el PJ “bueno” nunca dice nada al respecto.

Y es muy difícil entender el porqué de esta posición. Miguel Ángel Picheto dijo al salir CFK de la presidencia, “ahora puedo pensar”, y una le creyó. Si ahora puede pensar ¿por qué no critica nada de lo que hace o hizo CFK?

Guillermo Moreno (K), como presidente de la Comisión de Economía de diputados, le pidió al FMI que no le adelantara dinero a la Argentina, o sea al gobierno de Cambiemos. El PJ “bueno” ¿va a decir algo al respecto?

No se sabe qué pensar. Puede que los peronistas de cualquier tipo sean siempre y a pesar de todo, peronistas. Puede que teman que los que estuvieron en el poder tengan chances de volver y no quieren enemistarse.

Puede, y esta sería la peor suposición, que los K tengan carpetas para chantajear a los del peronismo “bueno”. Todas las opciones, todas, son malas y no dejan bien al aparente peronismo “bueno”. ¿Todos malos?

O como decía Jorge Luis Borges, “ni buenos ni malos, incorregibles.”
Si el PJ Federal o “bueno”, ese del que espera ingenuamente el gobierno algún tipo de apoyo en el congreso, no hace nunca declaraciones que descalifiquen a los K, ni siquiera un comentario sobre los cuadernos.

La Argentina ha comentado los cuadernos de Centeno, para creerlos o declararlos un invento de la CIA, o el delirio de un escritor frustrado, pero el peronismo “bueno” nunca dijo nada. Ni “¡qué horror!”, ni “es mentira”.

Nada. Y sin decir nada sobre los robos, las coimas, los chantajes, el desmanejo económico; el autoritarismo absoluto, ante un proyecto de ley la orden de “no se cambia ni una coma”, es imposible creer en otro PJ.

Si realmente están divididos, en PJ y cristinistas, que digan algo, públicamente, no en voz baja y entre ellos. Que se lo digan al país, cuestión de creerles. Con este nivel de mutismo, no se les puede creer.

Que acepten la retroactividad en la ley de extinción de dominio. ¿A qué le tienen miedo? ¿Qué les toque a ellos? ¿Qué CFK urda su venganza?  De no ser así, demostrarán que TODOS ellos, son los peronistas de siempre.

*Libertario: RAE, ácrata, anarquico.

jueves, 6 de septiembre de 2018

"NO ME ARREPIENTO"



Malú Kikuchi  (24(/2018)


“No. No me arrepiento”. Recordables palabras de Cristina Fernández el 22/8/2018, desde su barricada, perdón, desde su banca en el senado de la Nación. Cuerpo legislativo que aprobó el allanamiento de 3 propiedades de CFK, por unanimidad, sin condicionar al juez Bonadío.

La cuestionada ex presidente tuvo además de su exabrupto, algunas perlitas para la historia. Acusada por varios arrepentidos, empresarios en su mayoría que juran haber sido extorsionados por el matrimonio K para obtener trabajo en la obra pública, y acusada por algunos funcionarios.
Todos estos personajes están nombrados en los cuadernos de Oscar Centeno. Pero para CFK, forman parte, arrepentidos y cuadernos, de un creativo invento de la CIA para ¿quedarse? con la Argentina y terminar  con las exitosas políticas sociales en la región, o sea con el populismo.
Se comparó con Lula y con Correa. Ambos ex presidentes con suertes diversas, el primero está en la cárcel desde hace unos meses y el otro refugiado en Bélgica para esquivar las alertas rojas de Interpol, que le ha pedido el actual presidente de Ecuador, Lenín Moreno.  Tanto Lula como Correa, acusados de corrupción comprobada, no por cuestiones políticas.
Para referirse a la corrupción, que no negó, dijo: “¿Ustedes creen que la patria contratista y la cartelización de la obra pública comenzó en mayo 2003?” Ni los senadores propios, ni los opositores, ni la ciudadanía en general, creen eso. El problema es que a partir de mayo 2003, durante  los mandatos K, alcanzó volúmenes hasta entonces, impensables.
Más datos, más arrepentidos, más bolsos, más millones, más asco. Es difícil seguir el reguero de corrupción, de vergüenza ajena, de rabia, de incredulidad, sin que asome un sentimiento hasta ahora, prohibido, el odio. ¿Cómo soportamos esto durante más de 12 años? ¿Cómo?

Era una leyenda urbana, todos hablábamos de los bolsos, los millones de US$, las repetidas empresas que trabajaban en la obra pública, todo lo que se inauguraba, discurso mediante por cadena nacional y detrás de la bandera y los maceteros con plantas nuevas, no había nada. Nada.
Lo sabíamos, no hicimos nada. Es cierto que no se imaginó la magnitud del robo, de la expoliación al pueblo argentino, ni la inflación del 1200% (12/2015), la sentíamos, pero el INDEC mentía. Como mentía Cris cuando en la ONU decía que la pobreza estaba en un 5% y la indigencia en un 1,27%. Menos pobres que en Alemania, y de verdad era de un 30%.

Por si fuera poco, además de mentir abiertamente, sin ningún escrúpulo (hace pensar que quizás sea mitómana, que cree lo que dice o que su bipolaridad le hace decir disparates), volvió con la detestable costumbre de apuntar con el dedo índice, cual maestra de Siruela. Insoportable.

Y su política, pergeñada por Néstor y continuada devotamente por ella, llegó a todo el país. El tema de las coimas para la obra pública permeó provincias y municipios, nada se salvó. Hoy en día, gobernadores de todos los partidos, lo mismo que los intendentes, tiemblan, no duermen.

Todo un país corrompido (se dejaron corromper) da náuseas. Y nos preguntamos por qué si el US$ se aprecia en el mundo, nosotros bailamos más que el resto de los países emergentes. Porque Néstor, con maligna inteligencia, nos dejó de entrada sin energía, nos des autoabasteció. Y la energía se paga en US$. Era una forma de esclavitud.

Y Cris no se arrepiente. ¿Está convencida de haber hecho un gran gobierno? ¿Conoce la verdad? ¿Tanto leer a Laclau y tenerlo invitado a él ya su mujer, Chantal Mouffe en Olivos, le terminar de lavar el cerebro? Y nos quiere contar que es revolucionaria, osa hablar de 30.000 desaparecidos sabiendo que su ministerio de justicia y DDHH hablaba de menos de 8.000. Un desaparecido es una desgracia, pero entre las 2 cifras hay 22.000 personas, que no es poco.

Y no se arrepiente. Se victimiza. Planea una nueva candidatura. ¿En serio? ¿O trata de ganar tiempo? En este último caso, ¿para qué? Puede esperar que el poder judicial ante su candidatura entre en pánico por si gana, y cajoneen las denuncias. Todo es posible, pero hoy es poco probable.

Ahí entra la ciudadanía. Tenemos un poder enorme, descomunal, tanto que no lo imaginamos. Lo vimos con la 125 y el campo. Lo vimos con José Campagnoli. Lo vimos con el asesinato de Nisman. Lo vimos con la marcha de antes de ayer. Hay que seguir en la calle, hay que seguir.

Es nuestro país. Necesitamos limpiarlo para poder mirarnos a los ojos sin avergonzarnos. Para volver a estar orgullosos de ser argentinos o de haber elegido a la Argentina para vivir. Por nosotros, por los que nos hicieron una Patria, por nuestros hijos y por los que vendrán.


En cuanto a CFK, ¡qué pena!, no se arrepiente. Alguien debería decirle que el arrepentimiento es reconocer errores, y ese es un acto que libera, aunque esté en la cárcel.