EL GOBIERNO, EL BIG BANG Y EL CAOS
Malú Kikuchi (30/9/2922)
Argentina, Patria desdichada, allá en sus comienzos fue gobernada por dos
triunviratos. El 1º duró desde el 23/9/1811 hasta el 8/10/1812, compuesto por
Juan José Paso, Feliciano Chiclana y Manuel de Sarratea. El 2º gobernó desde el
8/10/1812 hasta el 20/2/1813, con Juan José Paso, Nicolás Rodríguez Peña y
Antonio Álvarez Jonte.
Tuvieron una ventaja, duraron poco tiempo. Y a partir del 10/12/2019
Argentina soporta un 3º triunvirato no explícito, pero real. El ganador de las
elecciones fue el FdT compuesto por Alberto Fernández “el moderado”, Cristina Fernández de Unidad
Ciudadana y Sergio Massa del Partido Renovador. Todos peronistas.
El presidente Alberto F. se ha convertido en un decorativo jarrón chino
de imitación, Cristina F. es la que realmente ejerce el poder, aprueba o veta y
sólo se interesa por sus problemas judiciales, que son graves y muchos. Sergio Massa
desde economía, algo que desconoce ya que es abogado, hace lo que puede y puede
poco.
El problema es que este triunvirato debe durar los 4 años establecidos
por la Constitución Nacional. Y chapoteando en la pobreza del 36%, tapados por
la inflación cercana al 100% anual, con
6 chicos de cada 10 (hasta los 14 años)
con hambre, sin importaciones y maltratando las exportaciones, sin reservas en
el BCRA, todo es casi imposible.
Hay astrofísicos que sostienen la teoría del Big Bang. Dicen que un punto ínfimo concentraba toda la
materia y en un momento dado, explotó. Al explotar la materia comenzó a
expandirse y enfriarse; al enfriarse (lo sigue haciendo) surgió el caos y del caos nació el universo. Dicen. De ser
así todavía hay esperanzas para Argentina.
Por el momento el país está sumido en el caos, la anomia, la confusión,
el desorden, el descalabro, el
desquicio. Está en pleno caos del que surgirá una nación en serio, si es que
los ciudadanos deciden dejar de ser habitantes y ejercer sus derechos.
Recordando al General Julio Argentino Roca, un país con “Paz y administración”.
Puede que detrás del caos presente, en la disparatada toma de colegios
(el pretexto de las viandas es para darle el negocio a Juan Grabois y sus
Cooperativas sin agro tóxicos), estén militantes de la Cámpora. Y padres y
funcionarios de la educación militantes y/o permisivos. La toma es un delito
que no se puede ni se debe permitir.
Puede que la huelga de los trabajadores del caucho, tema que tiene 5
meses sin resolver, donde al jefe del gremio (sólo 5.000 afiliados), Alejandro
Crespo, no se entiende qué pretende. Lo único claro es que 2 de las 3 empresas
de neumáticos, 2 se irían del país. Mucha gente se quedaría sin trabajo y no se
podría exportar autos.
Puede que Eduardo Beligoni, hombre del Partido Obrero, dueño de la
Avenida 9 de Julio, con sus uniformes, costosas, nuevas y perfectas tiendas de
campaña, acampe una vez más en la Avenida de todos los argentinos. Piden lo que
saben que no van a conseguir. Pero contribuyen al caos generalizado. Una ciudad
inviable.
Puede que en el sur, en el Parque Nacional Nahuel Huapi, en Villa
Mascardi, los terroristas que disfrazados de mapuches aterrorizan a los
residentes, incendian, hacen huir a los gendarmes, estén militarizados y
armados con armas de fuego. Puede que aconsejados por Perdía, Vaca Narvaja,
Urien y amparados por el Estado Nacional.
CFK repite que “todo tiene que ver con todo”. Tiene razón. Desde que el
fiscal federal Diego Luciani pidió 12 años de prisión para la “Jefa”, Hebe de
Bonafini habló de organizar una pueblada. El senador Mayans, jefe del bloque K
en el senado dijo: “Si quieren paz social terminen con el juicio de Vialidad”.
Y la Cámpora canta, “Si la tocan a Cristina que *quilombo se va a armar”.
Así está la Argentina, en pleno “quilombo”, esperando lo imposible, que
el Presidente presida, que la vice no piense sólo en ella y sus hijos, que
Massa pueda hacer algo más que emparchar, zurcir y remendar la economía. Que todavía
soñar no paga impuestos.
*Quilombo, en Sudamérica: Lío, barullo, gresca, desorden.